26 de septiembre de 2010

No es cuestion de hacerse el fuerte ni dejar de hacer el indio...


No soy perfecta. Y sé que lo sabes. Soy quisquillosa, rebuscada, un poquito porculera y además, de vez en cuando, me da por comportarme como una niñata malcriada. Por no hablar de mi capacidad de hablar las cosas cuando ya no deberían ser habladas. Tú quieres zanjar el tema, quieres olvidarte de mí, quieres no seguir escuchándome. Y sé que no debí hablarte de él después de cada beso que nos dábamos. Sé que has tenido miedo. Sé que has estado confundido y yo pude ayudarte y no lo hice (y por lo visto ya no lo haré) También sé, por supuesto, que no va contigo esto de dar otra oportunidad. Pero bueno, te doi las gracias. Gracias por cada sonrisa que me has robado mientras él sólo me hacía llorar. Gracias por haber estado ahí. Gracias porque te has ido y es entonces cuando me he dado cuenta de lo mucho que te voy a echar de menos. Y eso no va a cambiar. Al menos ya lo sabes, ¿no?

No hay comentarios:

Publicar un comentario