8 de junio de 2010

- ¡Eh, quieto ahí, amigo! No voy a dejar que vuelvas a hacerle daño a Janey, ¿vale? Y además: yo la amo.
- Yo también.
- Eeeeh... sssssí, pero soy su mejor amigo y he estado ante sus narices todo el tiempo, aunque ella aún no se ha dado cuenta, pero lo hará.
- Y yo soy el tío guay reformado que se da cuenta de que estaba equivocado, y ella va a perdonar mis errores y a comprender que la quiero de verdad.
- ¡Joder, eso es cierto...!

No hay comentarios:

Publicar un comentario